P. cl. HanónEl padre Mariana refiere que Safón, capitán cartaginense, enviado a España, gobernó en ella lo poblado por los cartaginenses y su ejército, y habiendo hecho guerra a los africanos y vencídolos con ayuda de los españoles, siete años después fue removido del cargo y llamado a Cartago con color de dalle el gobierno de la ciudad y el cargo más principal, el cual, como dice Festo Pompeyo, se llamaba Sufetes. La verdad era que les daba pena que un ciudadano con las riquezas de aquella opulentísima provincia creciese más de lo que podía sufrir una ciudad libre, dado que por hacerle más honra enviaron en su lugar tres primos suyos, Himilcón, Hanón y Gisgón, hijos de Amílcar, y a él, vuelto a su tierra, le hicieron grandes honras, con lo cual se ensoberbeció tanto que, teniendo en poco la tiranía y señoría de su ciudad, trató de hacerse dios en esta forma: juntó muchas avecillas de las que suelen hablar y enseñolas a decir gran dios Safón, dejólas ir libremente y como repitiesen aquellas palabras por los campos, fue tan grande la fama de Safón por toda aquella tierra, que espantados con aquel milagro los naturales de ella, en vida le consagraron por dios y le edificaron templos, lo que antes de aquel tiempo no aconteciera a persona ninguna.
Fuente: Sebastián de Covarrubias, Suplemento, fol. 224r