¿Qué armas? ―Una lima y dos naranjas. ―¿De veras? ―Y de sebo las velas. ―Juro a tal que os lleve preso. ―Aceitunas y queso
Habla la Justicia con un pobre escudero sordo que iba de noche y llevaba compradas de la tienda las dichas cosas; chiste es, aunque dicen sucedió en Salamanca a un Paz.