Suélese decir esto, cuando en una casa, pueblo o ciudad se levantan algunas discordias, que parece que las mueve y enciende el demonio. «Iuno opinor aliquem in nos, Eolum excitavit». Eram. Tomóse este adagio del libro primero de las Eneidas de Virgilio, donde se dice que la Diosa Juno pidió a Eolo, rey y dios de los vientos, que los dejara salir de la cueva, donde los tenía encerrados, para que alborotaran el mar y movieran una grande tempestad para echar a fondo la armada de los troyanos, el cual puso en ejecución lo que Juno le pidió, vel «Spirat Cæcias». Aristóphanes. Dícese cuando se mueven grandes alborotos, pleitos y riñas.
Fuente: Erasmo, 3792., Erasmo, Scrita selecta, IX., Virgilio, Aeneid, lib. 1., Erasmo, 3792.