P. cl. CalahorraCiudad y obispado; díjose antiguamente Arcilacis, vide in eodem verbo Abra. Ort. El nombre de Calahorra quieren algunos que sea arábigo, y que valga tanto como villa o castillo libre, pero los romanos la llamaron Calagurris, y a sus ciudadanos calagurritanos. Valerio Máximo, título De crudelitate, hace mención del cerco que Afranio puso a los de Calahorra tan apretado de su parte, y de la dellos tan obstinado, que se comieron los hijos y después sus mujeres; y al cabo habiendo sido entrados por fuerza, los pasó a todos a cuchillo y saqueó y derribó la ciudad, y de aquí nació un proverbio para encarecer una gran hambre, que decía: Fames calagurritana. Debían ser hombres de gran pecho y de fidelidad, pues Augusto César, cuando volvió de España a Roma, habiéndola reducido, llevó soldados de la cohorte calagurritana para guarda de su persona, de cuya lealtad estaba muy satisfecho y pagado.