P. cl. hechizarEn Tesalia, donde había tan grandes hechiceras, no se nombran los hombres sino las mujeres, quedando en proverbio Thessala mulier, que era tanto como decir hechicera. Vide Tiraquellum in octavam legem conubialem, glossae primae, part. 8. Martín del Río, en sus Disquisiciones mágicas, por todo el libro, y en particular en los libros quinto y sexto, trata muy a la larga de las hechiceras y hechizos; a él me remito. El rey don Ramiro, escriben las historias que con gran cuidado persiguió las hechiceras y a cuantos halló culpados los condenó al fuego.