21. | Las caídas, ni aun soñadas son buenas | P. cl. caídaPondéranse las malas consecuencias que suelen traer las caídas, hasta el punto que el que piensa que se cae, estando dormido, se despierta con gran sobresalto y doliéndole todo el cuerpo. |
22. | Las cañas se vuelven lanzas | P. cl. cañaA veces, lo que empieza por ser juego y broma acaba convirtiéndose en seriedad y disgusto. — Refiérese a los torneos antiguos, en que el antagonismo de los caballeros que justaban en los inofensivos juegos de cañas, convertía éstas en armas serias de combate en no pocas ocasiones. |
23. | Las cosas de amor avivan el ingenio y también quieren plática | |
24. | Las cosas, en caliente | P. cl. calienteEn el acto, luego, al punto, al instante, etc. |
25. | Las cuatro ces de los viejos: cursos, calentura, caída o casamiento | P. cl. ceTales son las causas que especialmente precipitan su muerte, y que son, atendiendo a la edad, de facilísima y, por tanto, inútil explicación |
26. | Las iras de los amantes son redintegración del amor | P. cl. amanteLos enfados entre personas enamoradas son pruebas de verdadero cariño. |
27. | Las que vais a coger berros, guardaos de los anapelos | P. cl. berroAconseja la cautela con que se debe caminar, para no dejarse sorprender o seducir de lo malo que tiene apariencia de bueno. |
28. | Las rencillas de los amantes es para confirmación de más amor | |
29. | Las tres ces de los viejos | P. cl. ceLas personas de edad avanzada están más expuestas que las demás a morir víctimas de una de estas tres circunstancias; a saber: de caída, de cólico o de cursos. Véase: |