Pondera la lealtad de este animal, llevada al heroísmo, pues a más de uno se ha visto situarse junto al cadáver de su amo, acompañarlo hasta la sepultura y permanecer allí sin permitir probar bocado, hasta el punto de fenecer de inanición.

El abuso exagerado de una cosa trae como consecuencia la abstención forzosa de ella.

Se refiere a la virtud de la paciencia, que tanto en unos como en otros tiene que estar bien desarrollada.

Los entremetidos, por más que los despidan, vuelven adonde conocen que han de sacar utilidad. Por ellos se dijo: Quien no tiene vergüenza, todo el campo es suyo.

Se reprende a los que llegan a la edad madura y aun a la vejez sin tener asiento en sus juicios ni cordura en su proceder.

Aquel que recibe las visitas y no las devuelve, es de presumir que no es gustoso de que vayan a verle.

Además de su sentido recto, se usa jocosamente también para significar que el que acaba de comer antes que los demás, suele invadir parte de la ración que a éstos pertenece.

Manifiesta lo fácil que es dar consejos a otro cuando no recae la responsabilidad sobre quien los da.

No se cogen truchas a bragas enjutas, o Quien quiera peces que se moje el culo, o No hay atajo sin trabajo

Denota que el que por naturaleza es torpe y rudo, pierde el tiempo estudiando fuera o dentro de su patria, pues rudo y torpe permanecerá.

El que carece del don de raciocinio, por más que se afane, nunca llegará a aprender.

Dícese del que, después de andar pensando mucho en la elección de una cosa, se decide por la peor.

Contra los habladores y parlanchines.

Por lo desubstanciado que es dicho manjar.

El que tiene a su alcance dinero en abundancia, no repara en lo que lo invierte.

Sátira contra los que, por ostentar industria y habilidad, dicen que el objeto comprado les costó menos del dinero que efectivamente han aprontado en su adquisición.