Sonsonete, generalmente usado entre chicos, que dirigen a la persona que lleva por detrás algún objeto extraño adherido a la ropa. —También se dice borriquito.

Manera de censurar a los que prefieren el tamaño a la buena calidad de las cosas.

Modo de denotar que por lo común aspiramos a más de lo que hemos conseguido.

Indica que el que en concurrencia con otros quiere lograr algo, tiene que emplear el máximum de esfuerzo para conseguirlo.

El que es diligente y activo en su oficio o menester, no necesita de estímulo alguno para obrar.

Encomia las buenas cualidades de resistencia del caballo que posee las condiciones indicadas.

Refrán muy corriente entre militares, para indicar que teniendo el equipo completo no les importan las revistas de los superiores.

Frase muy usual en Andalucía para indicar que a uno le importan poco los privilegios ajenos.

Ocasión o lance que impensadamente se ofrece para lograr aquello que se desea. Proviene dicha frase del juego de la argolla.

Alude a que los que tienen mucha cabellera suelen discurrir poco.

Denota que la mujer muy aficionada a componerse y divertirse no es la más a propósito para que atienda a los quehaceres domésticos.

Dícese cuando se ve una reunión de niños, generalmente hermanos, que son pequeños y de muy corta edad.

Denota que, por lo general, las personas que tienen pocas exigencias, pronta y fácilmente las satisfacen.

Preocupación popular bastante extendida de que el dormir con la cabeza hacia el Oriente preserva de enfermedades.

Aplícase a las personas cuyo carácter ligero hace que no piensen en nada con fundamento.

El que cuenta con pocos recursos o escaso talento debe aprontar, respectivamente, mayor actividad o aplicación.

Los hijos sacan, por lo común, el genio e inclinación de sus padres.